𝓓𝓸𝓷𝓭𝓮 𝓮𝓵 𝓭𝓸𝓵𝓸𝓻 𝓭𝓮𝓼𝓬𝓪𝓷𝓼𝓪

  La luz del sol iluminaba cada rincón y todo parecía alegría. Sin embargo, en el interior de su pecho, Paloma sentía una sensación muy difícil de explicar: era doloroso cuando recordaba a Yasuo.  Cuando miraba hacia los lados y el no estaba ahí. Extrañaba el sonido de sus pasos, su calor y hasta su voz.   -¿Como puede ser? - Se preguntaba a sí misma una y otra vez. No lograba entender por qué le importaba tanto su ausencia, si el no era nadie importante en su vida.  -No puedo sentirme de esta forma, por alguien que ni siquiera conozco. Yo solo quise ayudarlo y el no lo aceptó, y eso está bien, es su decisión . - Repetía en su mente- Cuando al fin llegó a su hogar, su abuelo fué la primer persona en recibirla. Había estado muy preocupado.  Paloma le hizo entrega de las bolsas que le enviaban y se retiró a darse un baño. Al acabar, permaneció en su hogar al lado de su familia, como de costumbre, realizando quehaceres. Les comentó sobre la tormenta y todo lo que había sucedido, pero no l